Actualidad - Swarovski y Ana Boyer, un tándem radiante

La hija menor de Isabel Preysler, excelente universitaria experta en economía, ha decidido apartar por un día sus estudios en la prestigiosa universidad de ICADE para seguir los pasos de su madre y protagonizar su primer posado en solitario.

El resultado, que se publica esta semana en la revista ¡HOLA!, no ha podido ser más brillante. Tras la aparente imagen inocente y tímida de Ana Boyer, hemos descubierto a una mujer tan guapa, extrovertida y elegante como su madre y su hermana Tamara.

La benjamina de Isabel Preysler ha demostrado ser el perfecto relevo generacional de una de las familias más glamorosas del panorama nacional.

Ana Boyer debuta para SWAROVSKI en su primer posado en solitario, luciendo joyas exclusivas de la firma austriaca. ‘Swing, Sing and Shine’, la nueva colección primavera-verano de Swarovski, está inspirada los sweet sixties americanos, más concretamente en el baile de debutantes de una joven universitaria. Todas las joyas y complementos de la colección respiran frescura, refinamiento y un aire vintage modernizado. Por este motivo Swarovski ha visto en Ana Boyer la imagen perfecta para dar a conocer su nueva colección en nuestro país.

“La nueva colección de SWAROVSKI es preciosa. Cuenta con joyas para todas las edades y además también tienen propuestas para ocasiones en las que hay que ir muy arreglado y para ocasiones más informales” afirma la joven estudiante.

Haciendo gala de su disciplina y profesionalidad la joven posó durante varias horas sin perder en ningún momento la sonrisa. Tras la cámara, se encontraba el fotógrafo Pepe Botella, experto en reportajes de moda y buen amigo de la familia.

Las estilistas Ana Antic y Cristina Reyes, la misma que viste a Tamara para fiestas y posados, contribuyeron también al éxito de la sesión. Ana, peinada y maquillada por Lola Viraz, se cambió de indumentaria ocho veces, siempre con looks juveniles cedidos para la ocasión por las boutiques Ekseption y JustOne. Gucci, Chloé, Nelsy Chelala y Louboutin son sólo alguna de las firmas que tuvieron el honor de vestir a la joven promesa.

Con este posado, Ana Boyer no solo ha demostrado ser digna sucesora de su madre y hermanas, si no que además, se ha revelado como perfecta embajadora para transmitir la pasión, la magia y el brillo incomparable del cristal SWAROVSKI.